Moussaka wiki
Precaliente el horno a 200°C/marca de gas 6. En un recipiente grande, empapar los trozos de berenjena con aceite de oliva y masajearlos bien, junto con un poco de sal. Extiéndalos uniformemente en una bandeja forrada con pergamino y áselos en el horno durante unos 20 minutos.
Mientras tanto, calentar una o dos cucharadas de aceite de colza en una cacerola grande de base pesada a fuego alto, añadir las cebollas y saltearlas durante unos minutos hasta que empiecen a dorarse. Añadir las hojas de laurel y la rama de canela.
Triturar el zumaque, la melaza de granada, el eneldo y la menta en una batidora con unos 100 ml de agua y añadirlos a los tomates en cocción. Incorporar el tahini, el puré de tomate y el zumo de limón y cocinar durante unos minutos más.
Cuando las berenjenas estén bien cocidas, añádelas a la olla y sazónalas al gusto. Añade los garbanzos para que se calienten en la salsa antes de servir. Está igualmente bueno servido caliente sobre cous cous o frío al día siguiente con yogur vegano y pan de pita.
Fatteh de berenjena
El Maghmour es un guiso vegetariano libanés de berenjenas, espeso y aterciopelado, con garbanzos, ajo, cebollas y tomates, con un sabor ahumado y ligeramente picante. El maghmour es un plato que se remonta a finales del siglo XIX; a veces se le llama musaka libanesa. Sin embargo, es muy diferente de la moussaka griega; una cazuela hecha con capas de berenjena, bechamel y carne. Moussaka es una palabra árabe que significa frío. La moussaka se sirve a temperatura ambiente o fría.
A mucha gente no le gusta la berenjena por su textura. La berenjena puede volverse blanda si no se manipula adecuadamente y, normalmente, yo salo la berenjena siempre que una receta pide berenjena. Salar la berenjena puede extraer los jugos amargos de las berenjenas más grandes y viejas. La sal también tensa y reafirma la carne, haciendo que la berenjena absorba menos aceite y, por supuesto, la sal añade sabor.
Con esta receta, descubrí que no era necesario salar las berenjenas antes de cocinarlas. Asar la berenjena en el horno hace exactamente lo mismo que la sal, sacando la humedad y haciendo la carne más firme. Esto fue una agradable sorpresa y puede que opte por asar las berenjenas para los platos en el futuro. A veces, la salazón de las berenjenas puede hacer que éstas queden demasiado saladas si no se aclaran lo suficiente.
Receta de batata harra
Esta moussaka libanesa (maghmour) es un delicioso plato de berenjenas y garbanzos que puede servirse caliente o frío. Es un plato muy popular en Oriente Medio y una fantástica cena fácil entre semana que también puede prepararse con antelación.
Berenjena – Se necesitan dos berenjenas grandes para hacer esta musaka vegana de berenjena. Elegir las mejores berenjenas para la moussaka no siempre es fácil: deben ser firmes, pero no duras. Por decirlo de otro modo, si se presiona con el dedo y la berenjena se siente muy blanda, es que ya ha pasado su mejor momento. Cuando toques una berenjena perfectamente madura, no cederá tanto como un tomate o un melocotón maduros, y eso es lo que quieres para esta musaka de berenjenas.
Aceite de oliva – Utiliza el aceite de oliva de mejor calidad que puedas, ya que realmente marca la diferencia en esta receta. necesitarás una cucharada de aceite de oliva para las berenjenas asadas y otra para saltear las cebollas.
Cubre la sartén con una tapa, baja el fuego y cocina a fuego lento durante 20 minutos, removiendo de vez en cuando. Si la moussaka se ve demasiado espesa, añada un chorrito de agua. Al final, el plato debe tener una consistencia de guiso.
Fatet batinjan
Esta musaca libanesa, Maghmour, es un sencillo y delicioso guiso vegano de garbanzos y berenjenas. La rica berenjena asada con mantequilla en una salsa de tomate fresca, con el firme bocado de los garbanzos carnosos, hacen de este un plato sano y saciante. Es aún mejor si se sirve frío al día siguiente.
Moussaka es la palabra árabe que significa “frío” y esta moussaka libanesa se sirve tradicionalmente fría con pan de pita. Aunque se denomine moussaka, este guiso de berenjenas se parece poco a la versión griega de la moussaka, de hecho me atrevo a decir que me recuerda más al gigantesco plaki griego de judías. Con berenjena cocida y garbanzos cocidos en una salsa espesa de cebolla y ajo, este guiso de verduras es rico pero ligero. Tradicionalmente, la berenjena se habría frito en una cantidad muy generosa de aceite de oliva, pero yo la he asado para reducir la cantidad de grasa, y he incluido un truco adicional en la receta para reducir aún más el contenido de grasa, sin dejar de obtener una berenjena suave y cremosa.